De mochilas y autonomía

Hoy, mientras aparcaba iba viendo cómo llegaban al colegio l@s niñ@s de primaria acompañados de sus madres y padres. Me he quedado observando quién llevaba la mochila o la bolsa de la merienda, para mi sorpresa los tres que he visto pasar eran los adultos quienes llevaban la "carga", y los niños jugueteaban alegremente alrededor sin llevar nada en las manos.
En ningún caso parecían bultos que los niños no pudieran transportar, de hecho, supongo que al llegar al colegio los llevarían hasta sus aulas.
Y esto me hace reflexionar ¿qué estamos haciendo con nuestros hij@s cuando ni siquiera les damos la responsabilidad de llevar sus cosas?. ¿Qué adultos estaremos construyendo?
Ya se habla de la llegada de una "generación blandita" con madres y padres que además de llevar la mochila piden que no se premie a los mejores para que los niñ@s no se "traumaticen" y que hacen los deberes a sus hijos que previamente han consultado en los grupos de whatsapp (pincha aquí para saber más de estos grupos) para que sus hij@s lleven siempre los deberes y no sufran "la frustración" de ver cómo el profesor les regaña o les pone una mala nota.
Se habla también en los colegios de niñ@s que al caerse en el patio no se levantan, se quedan esperando a que "alguien" los levante del suelo cuando pueden hacerlo perfectamente ellos mismos. 
Y todo esto tiene mucho que ver con la tolerancia a la frustración, sólo aprendemos a hacernos autónomos, independientes y maduros cuando nos ha tocado enfrentarnos a la frustración, cuando hemos recibido un no, cuando hemos tenido que hacer aquello que no nos apetecía y cuando la vida nos ha enseñado que muchas veces hay que posponer los propios deseos. (Pincha aquí para leer más sobre tolerancia a la frustración).
Cuando llevamos la mochila a nuestr@ hij@ le quitamos autonomía y responsabilidad y le estamos dando un mensaje: "tú no puedes", cuando le hacemos los deberes le estamos diciendo "tú no puedes", cuando resolvemos sus problemas sin contar con él le estamos diciendo "tú no puedes". 
Si durante nuestra infancia hubiéramos recibido permanentemente este mensaje: "tú no puedes" ¿qué clase de adultos seríamos hoy?, pues probablemente "blanditos", inseguros y con una muy baja autoestima (más sobre autoestima). ¿Cómo van a tener autoestima unos niñ@s cuy@s madres y padres no confían en ellos para hacer nada por sí mismos?.
Ayudemos a nuestros hijos a adquirir autonomía, debemos animarles a hacer todo aquello que pueden hacer por sí mismos, aunque sea difícil y tengan que enfrentarse a la frustración. Parece que nos cuesta darles alas a nuestr@s hij@s por si pudieran volar y olvidamos que el objetivo de todo lo que hacemos por ellos es precisamente ese, que vuelen, que sean autónomos, independientes y que sean felices disfrutando su propia vida y tomando sus propias decisiones. Y a ser autónomo e independiente se aprende desde la infancia, dando pequeños pasos de autonomía como llevar la propia mochila o la bolsa de la merienda. 
Cuando un niñ@ hace algo por sí mismo y no le sale bien, aprende, y cuando hace algo y lo consigue incrementa su autoestima. Cualquiera de las dos opciones es buena para nuestros hij@s. Resolver nosotr@s el problema, hacerle los deberes o llevarle la mochila no enseña nada. 
¿No es apasionante la tarea de educar?


Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Cómo hablar de la muerte a nuestros hijos?

Familia y escuela ¿todos a una?

Educación en igualdad de género